3 La Ofensiva de la Victoria. La Guerra ha terminado.: 0. La Ofensiva de la Victoria. La Guerra ha terminado.

Centro Geográfico del EA. Vuelo USA 1946

Se producen contactos y negociaciones entre el Consejo y el Cuartel General de Franco. Las posturas son encontradas, mientras Casado pretende un acuerdo entre iguales y libertad de movimientos para aquellos que deseen abandonar España, la posición de Franco es rendición incondicional con garantías de clemencia.

Sólo se pretende aquí dar una idea de cual era la situación en este tema en los prolegómenos del inicio de la ofensiva final.

La primera entrevista de Gamonal

231030MAR39. De Barajas despega un Douglas con destino a Gamonal (Burgos), viajan el teniente coronel de Estado Mayor don Antonio Garijo y al mayor de Caballería, diplomado de Estado Mayor en la Escuela Popular de Guerra, don Leopoldo Ortega, jefes respectivos de las secciones de Información y Operaciones en el Estado Mayor. Les acompañan tres miembros del S.I.P.M.
1100H. El Douglas aterriza en Gamonal.

En una habitación preparada al efecto en el pabellón de oficiales los emisarios de Casado se reúnen con los CTEs Medrano Ezquerra y Rodríguez Madariaga, del EM de Franco. Posteriormente se incorporan los coroneles Luis Gonzalo Victoria y a don José Ungría Jiménez, también del Estado Mayor de Franco. Preside el coronel Gonzalo.

El coronel Gonzalo señala que los poderes que personalmente tiene se reducen exclusivamente a poner en conocimiento de los emisarios «las normas para la ejecución de la rendición del Ejército enemigo».

El CTE Garijo manifiesta que trae igualmente un documento del Consejo de Defensa firmado por Casado, documento que entrega, así como un plan para la rendición de su Ejército, plan de entrega del territorio por etapas y zonas. Garijo plantéa cuestiones sobre temas de depuración de responsabilidades, facilidades para abandonar el territorio nacional por personal civil y militar, etc.

El coronel Gonzalo entrega al teniente coronel Garijo las «Normas para la rendición del Ejército enemigo y ocupación de su territorio».

En resumen

  • El 25MAR se entregará la aviación republicana en los aeródromos que se indican, llevando los aviones el armamento y equipo completo, pero sin munición.
  • El 27MAR, se dispararán en todos los sectores del frente salvas de artillería o cohetes, hecho lo cual por cada Brigada saldrá un grupo de emisarios, que se encaminarán a las líneas propias, llevando los datos completos sobre la situación de las fuerzas; que las de primera línea se hallarán formadas por Brigadas, a cinco o seis kilómetros a retaguardia y sin armas; que estas armas se depositarán en edificios aislados, debidamente custodiados; que se informará a los mandos nacionales de los medios pasivos de defensa, indicando los sitios en que se encuentran las minas; que hecho esto saldrán de las líneas propias patrullas, con destacamentos de zapadores, a las que se guiará debidamente, a fin de cortar alambradas, reparar los pasos e inutilizar las minas; que los jefes, oficiales y comisarios estarán separados de las tropas y lejos de ellas; que de cada Brigada se hará cargo una compañía del Ejército nacional, etc.
    En cuanto a las fuerzas de reserva en segunda línea, la entrega tendrá lugar en forma análoga, al llegar a sus inmediaciones las patrullas nacionales, formando las Brigadas fuera de los grandes poblados.

El teniente coronel Garijo lee el documento. Encuentra difícil el cumplimiento de las «normas»; algunas unidades de matriz comunista no obedecerán y las fechas para la rendición de la Aviación y el Ejército de Tierra son demasiado inmediatas. Él trae el plan de entrega del territorio por etapas y zonas; plan holgado y meticuloso.

Garijo señala que entregará al Consejo las normas del Generalísimo, a fin de que él decida y pide la celebración de una segunda entrevista. Se le contesta que no es preciso, ya que al entregarse la Aviación el día 25 puede venir en uno de los aparatos uno de los dos emisarios «para dar cuenta de lo que estimasen necesario y urgente».

Los cuatro jefes del Cuartel General del Generalísimo salen del aeródromo y marchan a su CG en Burgos para informar del desarrollo de este primer contacto. Los emisarios quedan en el pabellón del aeródromo donde se les sirve de comer.

Vuelven a reunirse todos a las 1600H. La nueva entrevista se limita a contestar a las preguntas que han sido motivo de ruego o consulta, «casi todas favorables en sentido de clemencia».

Sobre las 1700H parte de Gamonal el Douglas con destino a Madrid.

La segunda conversación en Gamonal

Madrugada 25MAR. Se recibe en Burgos un telegrama de la Sección Destacada del I Cuerpo de Ejército

«Consejero Defensa ruega a S.E. el Generalísimo que sábado 25 autorice llegada avión Burgos, Garijo, Ortega, para asunto capitulación. Juzga importante la entrevista. Den radio muy urgente, indicando hora llegada avión, consigna España si se acepta, y Madrid si no se acepta».

El Generalísimo contesta España. Ordena que se prepare esa entrevista en las mismas condiciones que la anterior.

1445H. Aterriza el avión procedente de Madrid en Gamonal.

La entrevista se lleva a cabo en el mismo lugar con los mismos asistentes. Según Garijo, el recibimiento es mucho más cordial que la vez primera.

El teniente coronel Garijo señala que

la entrega de la aviación no se podrá realizar este día 25MAR como se exige. Hay «dificultades de orden técnico», teniéndose en cuenta las diversas clases de aviones, así como su extenso despliegue, lo que obligaría, en ocasiones, a hacer escala en otros aeródromos. Sin embargo, «el jefe de las Fuerzas Aéreas estaba dispuesto a ser él el primero que se entregase con el personal de su confianza, pero que no respondía de los demás aparatos, por el temor de que las tripulaciones, una vez en el aire, se expatriasen».

El TCOL expone que todos están dispuestos a cumplir las órdenes del Generalísimo, pero él rogaba que

«las condiciones que tan benévolamente hacía S. E., en cuanto a las responsabilidades, se tradujesen en un documento para darles un carácter oficial y suscrito por persona que designasen las autoridades nacionales». No lo precisaban los militares, pero sí los políticos. Los obstáculos con que tropezaban eran grandes. En señal de buena fe de todos, «los generales Matallana y Menéndez y el jefe de las Fuerzas Aéreas se entregarían personalmente en la zona nacional, como acto simbólico», el día en que se acordara.

Se examinan los dos escritos que se presentan del coronel Casado.

Cor. Gonzalo. En ambos

«se eludía el concretar la aceptación de las Normas que se dieron en la entrevista anterior, y en el primero aún se insistía en la entrega por zonas y ritmo lento que propusieron anteriormente». No se aceptaban por el Consejo las «Normas para la rendición del Ejército enemigo y ocupación de su territorio»

La ruptura de las negociaciones

El coronel Gonzalo toma nota de los extremos expuestos por Garijo. Factor positivo, la buena disposición mostrada por los jefes principales para presentarse en la zona nacional como rehenes. Se prometía la entrega de la Aviación el 28MAR pero no el día 25, y por otra parte se desprendía que el Consejo quería tener segura la costa y las comunicaciones que conducían a ella, para que pudieran huir quienes lo desearan.

Todo conduce a un punto muerto.

Según Casado, se retiran en ese momento los representantes de Franco, «seguramente para informar a éste». Cuando regresan

«volvieron a ratificar su negativa, es decir, a no aceptar la entrega por zonas, si bien accedieron a redactar un documento que suscribirían con nosotros».

En el acta del coronel Gonzalo se da una versión de la rotura de las conversaciones de Gamonal, distinta.

«Rogaron los emisarios si se les permitía redactar los puntos que habían sido objeto de aclaración en el documento de 6 de febrero, y así se accedió.“ No se dice nada de redactar un documento a suscribir por las partes.

Estamos en el día previo al inicio de la ofensiva final. Es ya muy tarde y nada se ha conseguido y por todos los indicios es imposible que algo se consiga.

En el acta se dice:

«Pero prolongándose la estancia de los emisarios más de lo que las circunstancias aconsejaban, debido al retraso grande con que hicieron su llegada, el coronel Gonzalo se puso al habla por teléfono con el general de Estado Mayor del Cuartel General, explicándole a grandes rasgos el resultado de la entrevista, de la que no se deducía nada claro ni por lo hablado ni por los documentos entregados, que hubiera el propósito o por lo menos la posibilidad de cumplir las Normas de entrega del Ejército, que se dieron en la reunión anterior. A esto contestó el general de Estado Mayor que se cortase la reunión y salieran en vuelo, toda vez que aún tenían tiempo de regresar, puesto que lo único que se sacaba en consecuencia era su propósito de prolongar las conversaciones».

Así se hace y en pocos minutos el avión con los emisarios de Casado despegaba con destino a Madrid.

Contactos finales

En la despedida, el coronel Gonzalo dice a los emisarios de Casado que quedaría un hilo directo para la comunicación entre Madrid y Burgos.

2130H. En Madrid se reúne el Consejo, con asistencia de Garijo y Ortega. Aún se llevarán a cabo últimos intentos para detener la inminente ofensiva enemiga.

260245H. Se recibe en Burgos un mensaje del Consejo de Defensa que dice

«Mañana lunes se entregará Aviación. Rogamos fijen hora. Imposible hoy por servidumbres técnicas».

260325. Nuevo mensaje

“Ampliamos radio anterior para manifestar que tal vez sea posible entregar Aviación tarde hoy. Caso así se comunicará oportunamente».

260817H. Se envía un tercer mensaje, urgentísimo, cuando ya se ha roto el frente por el sector extremeño de Cabeza de Buey y el andaluz de Peñarroya

«Este Consejo, que ha puesto de su parte todo lo humanamente posible en beneficio de la paz, con la asistencia incondicional del pueblo, reitera a ese Gobierno que la reacción que pueda producir la ofensiva constituye su preocupación fundamental y espera que, para evitar daños irreparables producidos por la sorpresa, permita la evacuación de las personas responsabilizadas. De otro modo es deber ineludible del Consejo oponer resistencia al avance de esas fuerzas».

Respuesta a los tres mensajes

«Ante inminencia del movimiento de avance varios puntos de los frentes, en algunos de ellos imposible ya de aplazar, aconseja que fuerzas rojas en línea ante preparaciones de artillería o aviación saquen bandera blanca, aprovechando la breve pausa que se hará, para enviar rehenes con igual bandera objetivo entregarse, utilizando en todo lo posible instrucciones dadas para entrega espontánea».