Obra derivada de Mapas Generales IGN
En otoño de 1938 , terminada la Batalla del Ebro, la situación de Cataluña es dramática, aislada y sin posibilidades de defensa.
La única esperanza está en «la otra zona“. El Grupo de Ejércitos de la Región Central es todavía muy poderoso. Es la gran esperanza.
Pocos piensan que todavía se puede ganar la guerra. Se busca una victoria que pueda salvar Cataluña y alargar la guerra en espera de “algo”. Bien enlazar con la esperada guerra en Europa, escenario un poco más lejano después de “Munich”, bien convencer al bando contrario de la conveniencia de finalizar la guerra mediante una paz negociada, opción que Franco siempre ha descartado.
El Grupo de Ejércitos de la Región Central, con el general don José Miaja como jefe supremo y el general don Manuel Matallana al frente del Estado Mayor, dispone de
- cuatro Ejércitos,
- 17 Cuerpos de Ejército,
- 53 Divisiones
- y 144 Brigadas de Infantería,
- tres de Caballería,
- dos de Artillería antiaérea, más de 800 piezas de campaña
- y 47 batallones de Obras y Fortificaciones;
- aparte de otras unidades menores y de servicios.
El punto débil es la aviación; unos 100 aparatos, aunque con buenos campos de aterrizaje.
Guarnecida la línea de contacto de manera adecuada, bien situadas las reservas locales, todavía queda una potente Reserva General, en condiciones de emprender acciones estratégicas sobre objetivos de gran alcance.
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En el mes de junio de 1938, el «Plan P“ figura dentro de un cuadro general de proyectos estratégicos del Estado Mayor Central .
En esencia, una ofensiva en Extremadura y Andalucía, destinada a cortar las comunicaciones enemigas de Norte a Sur, «y favorecer el levantamiento de la segunda de aquellas regiones».
En la zona que se trata, La Serena extremeña, se ha formado desde el inicio de la guerra un entrante que amenaza directamente a Mérida. Durante el verano de 1938, los nacionales, que han detectado el peligro, toman la iniciativa y pretenden reducir esa amenazante bolsa. Será la Batalla de la Serena. Primeras fases favorables a los nacionales que logran cerrar la bolsa. Refuerzo importante del Ejercito de Extremadura que lanza una potente contraofensiva que consigue recuperar parte del terreno perdido. El Ejército de Extremadura no puede mantener la ofensiva y se vuelve a estabilizar el frente. Mérida estuvo a su alcance.
El 8 de noviembre, ante la evolución de la situación general de la guerra, Rojo explica al doctor Negrín las dos decisiones inmediatas más convenientes que se deben tomar:
- la de resistir a toda costa en Cataluña, a fin de dar tiempo a que llegue de Francia el material soviético esperado,
- y la puesta en ejecución del plan «P“.
A mediados de noviembre, Rojo marcha a Valencia para inspeccionar el desarrollo de las directivas dadas y pulsar el estado moral de los mandos y la tropa. Su impresión es muy pesimista. La falta de material y la escasez de unidades pueden hacer que se llegue «tarde», es decir que el enemigo inicie la prevista invasión de Cataluña antes de que entre en ejecución el Plan P.
El G .E.R.C. tiene en Reserva General nueve Divisiones dispuestas a operar en los primeros días de diciembre. Al parecer faltan hombres y armas y las Divisiones no son de la confianza necesaria.
«Operando se corría el doble riesgo de fracasar en los primeros días y gastar las reservas en un esfuerzo local».
Antes de regresar a Cataluña da al G.E.R.G. una nueva Instrucción reservada, adaptando el primitivo plan a la situación y a los medios. El nuevo Plan P se convirtiéndolo en un «plan mínimo para caso de urgencia“.
Se deberá estar en condiciones de ejecución del nuevo plan a las 48 horas de darse la orden. Se trata de una solución de emergencia. El 23 de noviembre Rojo presenta a Negrín un Informe, donde se aconseja «no realizar la ofensiva de Extremadura hasta el momento que resultase indispensable». La iniciativa queda en manos del enemigo.
El 6 de diciembre, Rojo da al jefe del Gobierno y Ministro de Defensa un nuevo Informe. Muy pesimista.
- El ataque enemigo sobre Cataluña será inmediato y muy potente
- en el frente de Extremadura se ha detectado una peligrosa concentración de fuerzas enemigas que amenaza Almadén.
- La actividad aérea enemiga es general, buscando probablemente la desmoralización de toda la retaguardia republicana.
El general Rojo expone al doctor Negrín el plan operativo muy brevemente.
En la Región Central,
- el día D, por sorpresa y audazmente, un desembarco en la costa mediterránea que supusiera una amenaza para Málaga y Granada, actuando combinadamente una Brigada de desembarco, la Flota y fuerzas de tierra, cuyo objetivo será atraer las reservas enemigas situadas en Extremadura.
- D+5. En el frente Córdoba-Peñarroya, tres Cuerpos de Ejército llevarán a cabo el ataque principal, con objeto de romper las comunicaciones Norte-Sur enemigas, crear una situación difícil en esa región y en toda Andalucía, incluso quizá dejando abierto el camino hacia Sevilla.
- D+12. En el frente del Centro, un ataque complementario deberá cortar las comunicaciones entre el frente de Madrid y el Sur.
El Informe termina con palabras que expresan la gravedad del momento:
«Aunque no sea necesario, porque conoce V .E. perfectamente nuestra situación, se considera obligado el General que suscribe a poner de relieve la importancia de la situación militar planteada en los momentos actuales, principalmente porque por las circunstancias de todo orden que en ella concurren puede conducir a la decisión de la guerra, tanto si el enemigo logra sus propósitos, como si nuestro plan de maniobra en el Centro y nuestra resistencia en Cataluña tuvieran resultados favorables. El esfuerzo que se va a pedir a nuestros combatientes es el mayor de cuantos se les ha exigido durante la guerra».
Es el anuncio de la última gran batalla de la guerra.
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El 8 de diciembre el jefe del CE XXIII/AND, teniente coronel don José María Galán, da una Orden general de Operaciones
«El Ejército propio va a lanzarse a una ofensiva a fondo, que requiere una acción por parte del Ejército de Andalucía que distraiga la atención del enemigo, atraiga sus reservas y al propio tiempo consiga una rectificación a vanguardia de la línea propia».
Misión. Ocupar Motril y Vélez de Benaudalla, «situando la línea defensiva a vanguardia de estos puntos».
Medios. División 23 , al mando del teniente coronel don Carlos Jiménez Canito.
Articulación. Dos Agrupaciones, con las que cooperará denominada Brigada «Y», a proporcionar por el G.E.R.C.
En la orden del TCOL Galán no figura la operación de desembarco.
No obstante, la misión de la Brigada «Y» es realizar el desembarco «por sorpresa» en el propio puerto de Motril. Realizado el desembarco, la Brigada ocupará Motril y los accesos desde Málaga, progresando hacia Vélez de Benaudalla hasta establecer contacto con una de las Agrupaciones de la 23 División.
- La AGR 1, operará en el Sector de Sierra Lújar, rompiendo el frente y apoderándose, «a toda costa», de Vélez de Benaudalla.
- La AGR 2, progresará sobre el vértice Conjuro y la carretera de Castell de Ferro a Motril, asegurando el tránsito por la misma y llegando al río Guadalfeo.
La Brigada «Y», era una Unidad especial y circunstancial, creada exclusivamente para llevar a cabo el desembarco y formada con sendos batallones de cada uno de los Ejércitos de Levante, Centro, Andalucía y Extremadura, que, a las órdenes del mayor de Carabineros Miguel Arriaga serían llevados a la zona del cabo de Palos, donde deberán realizar una instrucción adecuada.
Una División de cruceros, formada por el Libertad, el Miguel de Cervantes y el Méndez Núñez, y la flotilla de destructores, al mando del almirante Ubieta, zarparía de Cartagena para convoyar desde Almería los barcos mercantes cargados de tropa y varios «bous».
La suspensión de la «operación Motril’
No se dispone de datos sobre la instrucción dada a la Brigada «Y», tampoco sobre la dirección marítima de la operación y otros puntos concretos.
Parece probable que la instrucción fuese correcta y las directivas dadas por Rojo al mando de la Flota, almirante don Miguel Buiza, acertadas.
En los días previos a la operación, Rojo muestra un cierto optimismo, dentro de la situación angustiosa que le rodea.
«Es cierto que las operaciones en la Región Central podían fracasar por la escasez de medios»; sin embargo «la gran amplitud dada al plan y el largo tiempo que llevaban en reposo aquellos frentes», abonaban el posible éxito, lo que obligaría al enemigo a llevar reservas importantes y generales o, al menos, parte de ellas, paralizando, o retrasando al menos, la ofensiva sobre Cataluña.
La noche del 5 al 6 de diciembre se confirman radiotelegráficamente las órdenes de actuar, complementadas por correspondencia.
La operación debe iniciarse el día 8 ya que se espera el enemigo comience la ruptura del frente catalán el 10.
Rojo
«No hay más remedio que actuar y hacerlo urgentemente». Al parecer hay dificultades por parte del Jefe de la Flota «respecto a la luna y otros detalles», pero la operación es, sencillamente, «indispensable». Hay que operar a fondo, «sin reservas mentales de ninguna clase», pues se va a ventilar, nada menos, «la fase final de la guerra».
Un primer retraso, por «dificultades y los múltiples detalles de acoplamiento», traslada el día «D» desde el 8 al 11.
Pero en los últimos momentos el general Rojo recibe una carta de Miaja, fechada el 8 y que al parecer ha sido llevada por mar. En la carta se repiten las dificultades de la operación, expuestas con anterioridad, no limitándose Miaja
«a señalar su disconformidad y a declinar toda responsabilidad»
sino que, además, manifiesta
«el absoluto acuerdo en que con él está el Jefe de la Flota».
En aquellos momentos los barcos navegan ya camino de su destino y Matallana se dirige a su puesto de mando.
Rojo consulta inmediatamente con el jefe del Gobierno y ministro de Defensa y entonces se decide suspender la operación y ordenar a los barcos que vuelvan a su base.
Rojo no pudo explicarse la oposición de Miaja y Buiza a ejecutar el desembarco, precisamente en el último momento, cuando ya todo está en marcha. ¿Sabotaje? Rojo
«Habíamos hecho personalmente, el General Jefe de Estado Mayor del Grupo de Ejércitos y yo, el reconocimiento de la zona de maniobra y elegido la línea de ruptura del frente enemigo, y comprobado la posibilidad de lograr esa ruptura en cuanto se pusiera mediano coraje en la operación.
Personalmente también me había asegurado el Jefe de la Flota que dejaría las tropas en el Puerto; la razón principal de la dificultad que este Jefe señalaba era el temor de que fuesen descubiertos los transportes por la luna; dificultad que yo apreciaba también, pero que no estimaba suficiente para suspender el ataque».
La información señala que el puerto de Motril cuenta con pocas y malas defensas y que enfrente había cuatro batallones, al parecer de baja calidad, acreditados por su pasividad a lo largo de los días; «por añadidura , en la zona enemiga afectada por nuestro ataque, la población era bastante adicta a nuestra causa, como se había puesto de relieve en la liberación de los presos de Carchuna en un audaz golpe de mano».
«La batalla de Cataluña comenzamos a perderla al suspender la operación sobre Motril».
Miaja, que conocía el proyecto desde hacía meses, había obrado en total insubordinación a un mando superior. «El hecho era, como tantos otros, el efecto de un sistema absurdo en el ejercicio del Mando militar y en la dirección de la guerra».
Algunas fuerzas de las que debían operar por tierra, en combinación con las que habían de desembarcar en Motril, comenzaron a operar, tal vez ignoraban la suspensión del desembarco; nada pudieron hacer y se replegaron.
Peñarroya
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La suspensión del desembarco en Motril no cancela la operación principal. Se ejecutará en la unión entre Badajoz y Córdoba pero con importante retraso con respecto a lo planeado.
La zona Peñarroya-Fuenteobejuna-La Granja de Torrehermosa-Los Blázquez ha estado muy activa durante toda la guerra.
- Se ocupó por las columnas de Queipo de Llano en octubre de 1936.
- Tras la Batalla de Pozoblanco, MAR-ABR1937, la República recupera una importante extensión de terreno. Allí se encuentran Los Blázquez, Valsequillo y La Granjuela.
- En JUN37 se recuperan algunas posiciones más.
- En SEP37, el coronel Burillo, lleva a cabo una serie de ataques muy peligrosos que tendrán las primeras respuestas nacionales, de pequeña entidad, en octubre y en enero y marzo de 1938.
- En julio del 38, el Mando nacional emprende operaciones de gran alcance, Batalla de la Serena, que tendrán por objeto cerrar la bolsa de Mérida y, en su caso alcanzar Almadén. La Bolsa se llega a cerrar pero una fuerte reacción republicana detiene el avance nacional y logra recuperar parte del terreno perdido. Los nacionales mantiene el saliente de Cabeza de Buey.
Al sur de la bolsa formada sobre el Zújar está Peñarroya, objetivo de gran valor por sus minas y su complejo industrial. En el fondo de la bolsa, está Azuaga y mas adelante Llerena, ya en la carretera de Mérida a Sevilla, objetivo lejano pero de gran interés.
En esta zona tan endurecida es donde el general Rojo plantea su última gran maniobra de la guerra española.
Singularidades topográficas fundamentales de la zona son
- La divisoria de aguas entre las cuencas del Guadiana y el Guadalquivir (Sistema Mariánico ).
- El valle del Zújar.
- Los puertos en la divisoria entre los valles del Zújar y Guadamez que conducen al valle de La Serena.
General Díaz de Villegas, sobre esta zona
es «muy sinuosa», y tan caprichosa e irregular que puede decirse que el Guadalquivir «ha captado» diferentes afluentes del Guadiana; ejemplo clásico de anormalidad topográfica, casi caótica.
Coronel Fúster Vilaplana
«En general las líneas montañosas divisorias están formadas por pequeñas sierras que dejan entre sí llanos o valles dedicados a cultivos o pastos. Estas sierras están unidas por collados de poca altura, y no tienen gran corpulencia ni aspereza.»
El vértice Calaveruela, 720m, al Suroeste de Fuenteobejuna. De aquí parten
hacia el Norte el Zújar, afluente del Guadiana
el Guadiato, primero hacia el oeste y luego hacia el Sur , afluente del Guadalquivir.
Entere ambos ríos aparecen numerosas serranías, de forma revuelta, sin alineación regular.
Una fuerza que avance de Norte a Sur encontrará
- una primera alineación, formada por las Sierras del Torozo, Mesegara, Trapera, Patuda, Cerro de la Cruz y Alcornocosilla.
- a continuación otra definida por las Sierras del Coscojo, Cabrón, Castillo de Los Blázquez, Noria, Perú, Tejonera y Los Castillejos
- y finalmente aparecen las Sierras del Ducado, Herrera, Grana, Cabras, Santos y Gata, las dos últimas en la margen derecha del Guadiato.
En la izquierda del río Zújar se encuentran las Sierras del Oro, Argallanes, Santa Inés. Entre ellas se sitúan una serie de puertos muy característicos, Vuelos, Monterrubio, Calabar, Castuera, Urraco. Pasos que tendrá que salvar toda fuerza que pretenda progresar de Norte a Sur.
Este terreno variado facilita la maniobra. La concentración de fuerzas se puede realizar con facilidad a cubierto de vistas y favorecida por algunos bosques. La infiltración y sorpresa relativamente fáciles de obtener.
La batalla de Peñarroya se iniciará con una infiltración por un estrecho boquete.
Centro Geográfico del Ejército. Guía Militar de Carreteras, CG del Generalísimo 1939
Las fuerzas republicanas dispone de dos ferrocarriles a través de los cuales se puede acceder de forma segura hasta la zona de Almadén por el Norte y hasta Pozoblanco por el Sur.
Las nacionales disponen también de una buena red ferroviaria. La general de Norte a Sur, que discurre desde Salamanca a Sevilla, por Cáceres, Mérida, Llerena y Fuente del Arco, con el ramal de Fuente del Arco a Azuaga, Fuenteobejuna y Peñarroya. Desde Peñarroya se dirige por Bélmez y Espiel, hasta Córdoba.
En cuanto a carreteras,
- las fuerzas republicanas cuentan con el un importante nudo de comunicaciones de Hinojosa del Duque. Desde ahí los movimiento tácticos y logísticos tanto desde la retaguardia como hacia vanguardia no presentan dificultades. Además existen numerosos caminos transitables que facilitan los movimientos.
- Las tropas nacionales también cuentan con una buena red de carreteras, con loa importantes nudos de comunicaciones de Castuera, Llerena, Cazalla de la Sierra, Lora del Río y Posadas.
Coronel Fúster
«Desde el punto de vista militar, toda la zona es viable para el desarrollo de las operaciones, movida, pero no quebrada, lo que facilita el movimiento de tropas y el empleo de medios mecanizados; y el hecho de no formar las sierras una línea continua, facilita las infiltraciones para desbordar las defensas».
Sólo en torno a Hinojosa del Duque se encuentran «manchas de bosque, que, junto con la dirección de sus carreteras, permite concentrar una masa de maniobra con garantía de secreto».
Obra derivada de Mapas Generales IGN
Este frente se encuentra estabilizado desde septiembre de 1938.
El Ejército del Sur, al mando de Queipo de Llano, JEM coronel Cuesta, CG en Sevilla, dispone al terminar el año 1938 de tres Cuerpos de Ejército y una Reserva.
La zona de ruptura elegida por el general Rojo se encuentra precisamente en la unión de los Cuerpos de Ejército II, de Extremadura, y IV, del Guadalquivir.
El CE II, al mando del general don Luis Solans, JEM coronel don Enrique González Pons, PC en Villanueva de la Serena, cubre el frente desde el Guadiana hasta el collado situado entre las Sierras Mesegara y Trapera.
Sus Divisiones 21 y 24 habían sido reforzadas recientemente con la 102.
- La 21, coronel don Luis Oliver, se extiende por la derecha hasta Benquerencia de la Serena, incluida;
- la 102, coronel don Antonio Castejón, sigue hasta el Sureste de Cabeza de Buey,
- y la 24, coronel don Enrique Rodríguez de la Herrán, defiende el resto del frente.
El IV Cuerpo, al mando del general don Francisco Borbón, JEM coronel don Luis Molina Rodríguez, CG en Córdoba. Situado a la derecha del II se extendía hasta el pueblo de Albendín, muy al Sur de la provincia cordobesa.
De Oeste a Este se encuentran
- la 22 División, coronel don Alfredo Erquicia, que despliega hasta el vértice Pedregosillo, incluido;
- la 23, general don Mariano Muñoz Castellanos, despliega hasta el pantano de Guadalmellato,
- y la 31, general don Martín Prat, que cubre el resto del frente.
El Ejército del Sur dispone de tres Divisiones de Reserva y cuenta con una Reserva General de Artillería de nueve grupos, con 24 baterías.
El ataque inicial se llevará a cabo sobre los sectores de las Divisiones 24 y 22. Estas Divisiones están organizadas a base de tres Regimientos, a tres batallones cada uno, y dos grupos de artillería ligera.
Obra derivada de CC-BY 4.0 ign.es MTN50ImpresoSerie 1875-2022
El frente a cubrir por las Divisiones del Ejército del Sur es muy extenso, incluso para una situación de estabilización. Las Divisiones 24 y 22, defienden extensiones lineales de 37 y 40 kilómetros.
La economía de medios es muy rigurosa, se ocupan sólo aquellas posiciones fundamentales sobre comunicaciones y puntos de paso obligado. El resto del frente se cubre con puestos de vigilancia y patrullas móviles. Se mantiene una reserva relativamente potente y bien situada.
El plan defensivo habitual en frentes estabilizados empleado durante toda la guerra. Resistir a toda costa el ataque en las posiciones y esperar la llegada de reservas.
En la parte que se lleva a cabo la ruptura, la densidad de fuerzas de la División 22 es aceptable, con centros de resistencia en
- Sierra Trapera,
- Collado del Contrabandista
- y Sierra Patuda, con una posición de enlace en la cota 620.
La 24 División tiene sus centros de resistencia
- en torno al kilómetro 7 del ferrocarril de Almorchón,
- Casa Mataborracha-vétice Moritos
- y Sierra Mesegara,
con separaciones de 13 y 6 kilómetros.
Defienden los centros de resistencia
- Sierra Mesegara, II batallón de F.E.T. de Huelva;
- Mataborracha-Moritos, III batallón de F. E. T. de Sevilla;
- kilómetro 17 del ferrocarril, CCXXVI batallón de Granada;
- vértice Trapera, IV batallón de Granada;
- Collado del Contrabandista, XII batallón de Granada;
- Sierra Patuda y cota 620, I batallón de Granada.
ORG NAC
División 22.
Jefe de la Infantería: teniente coronel don Antonio Álvarez Rementería.
Jefes de los Regimientos: tenientes coroneles don Cayetano Vázquez Sastre, don Manuel Poch Ariza y don Benito Campos García.
Unidades:
- batallones I, IV y XII de Granada y I de F.E.T. de Málaga;
- VII de Granada, XII de Cádiz, II de F.E.T. de Málaga y II de F.E.T. de Canarias;
- VI y XV de Granada, V de Sicilia y IV de F.E.T. de Cádiz.
Caballería: una sección.
Artillería: cuatro baterías.
Ingenieros: tres compañías.
División 24.
Jefe de la Infantería: teniente coronel don José Díaz Fernández.
Jefes de Regimiento: tenientes coroneles don Fernando Rama Cabo, don José Machuca y don Francisco López Martínez.
Unidades
- batallones II y X de Granada, III de F.E.T. de Málaga y VIII tabor de Ceuta;
- IX y XI de Granada, II de Castilla y VII de F. E. T. de Sevilla;
- XIV y CCXXVI de Granada, II de F. E. T. de Huelva y III de F.E.T. de Sevilla.
Caballería: una sección.
Artillería: cuatro baterías.
Ingenieros: tres compañías.
EEXTR
Frente al Ejército nacional del Sur despliegan dos Ejércitos republicanos: el de Extremadura y el de Andalucía.
El Ejército de Extremadura, al mando del general don Antonio Escobar, JEM teniente coronel don Ramón Ruiz Fornells, CG en Almadén. Se compone de tres Cuerpos de Ejércitos:
- el VI, teniente coronel don Manuel Gallego Calatayud,
- el VII, teniente coronel don Martín Calvo
- y el VIII, teniente coronel don Alejandro Sáez de San Pedro.
CE VII, las Divisiones son
- la 41, mayor de milicias Damián Fernández,
- la 37, mayor de milicias José Sabín,
- y la 68, mayor de infantería Justo López Mejía.
El VIII Cuerpo, Divisiones
- 51, mayor de milicias Antonio García Molina,
- la 38, mayor de milicias Bartolomé Fernández Sánchez,
- y la 63 , teniente coronel Julián del Castillo.
El G.E.R.C. es todavía muy potente en estos días, al menos sobre el papel.
Miaja dispone de cuatro Ejércitos, 15 Cuerpos de Ejército, y una Agrupación y Reservas de entidad, en conjunto, superior dos Cuerpos de Ejército. Un total aproximado de 53 Divisiones y 147 Brigadas.
Esta importante masa de Unidades, que puede moverse por líneas interiores, permite sostener bien los diferentes frentes, mantener fuertes reservas y formar, si se precisa, una masa de maniobra para desempeñar misiones estratégicas.
Es lo que se intenta hacer.
Obra derivada de Mapas Generales IGN
El CE VI cubre la línea del Tajo y la zona de Cáceres, no afecta a esta Batalla.
El límite entre el VII y el VIII está en el vértice Torozo. El VIII llega hasta el Guadalquivir, al Este de Montoro.
CE VII,
- la 41, al Norte del Guadiana,
- la 37, hasta el frente de Campanario,
- la 68, hasta el límite del CE.
CE VIII,
- la 51, desplegada hasta el entrante que apunta a Los Blázquez,
- la 38, desplegada hasta la Sierra Chimorra, excluida,
- la 63 , hasta el límite del Ejército.
Centro Geográfico del Ejército. Guía Militar de Carreteras, CG del Generalísimo 1939
Cancelada la «operación Motril» , nuevas órdenes en detalle.
Directiva número 1 de 15 de diciembre, del EM del GERC, «Operaciones en el Sector de Hinojosa del Duque».
Misión del Ejército de Extremadura
“Actuar ofensivamente», rompiendo el frente entre las Sierras Trapera y Patuda, acción principal, y reduciendo el saliente de Cabeza de Buey, acción secundaria.
La acción principal se iniciará con una preparación de artillería corta pero muy violenta, reforzada con el bombardeo de la aviación.
Roto el frente se penetrará resueltamente por el boquete creado con columnas motorizadas, que seguirán la dirección principal Valsequillo-Granja de Torrehermosa. Sucesivamente otra Columna, en parte motorizada y con gran proporción de caballería y elementos blindados, envolverá por retaguardia las defensas de Cabeza de Buey, provocando la caída de esta localidad.Acciones de distracción. Se contemplan ataques locales en las direcciones de Castuera, Cabeza de Buey y Villafranca de Córdoba.
En la Directiva se contempla que, caso de obtenerse «un franco y rápido éxito, con la consiguiente desmoralización y derrumbamiento del frente enemigo», se explotará la situación favorable, continuando las fuerzas de la acción principal en dirección a Llerena. El VII Cuerpo constituirá una masa de maniobra para seguir la dirección Campanario-Mérida. Con caballería y fuerzas blindadas se organizará otra Columna para marchar sobre Retamar y Villafranca de los Barros.